– Las botellas se deben mantener refrigeradas. Es importante que no pase más de 1 día a temperatura ambiente (seguirá fermentando y se volverá más ácida).
– La Kombucha es considerada una bebida analcohólica (menos de 1% de alcohol) ya que tiene alrededor de 0,5% de alcohol en condiciones normales. Si no se mantiene refrigerada y pasa mucho tiempo puede llegar a superar el 1% (alcohólica), ya que sigue fermentando (producto vivo).
– En teoría la Kombucha puede mantenerse refrigerada por muchos meses sin vencerse, pero los microorganismos pueden entrar en un estado de dormancia con el tiempo, por esto nosotros recomendamos consumirla lo antes posible (idealmente las primeras semanas).
– Todo lo que hay en el interior de la botella se puede consumir, tanto lo que se deposita en el fondo (levadura) como posibles conglomeraciones (mini SCOBYs) o pequeñas partículas de los adjuntos. Si no se quiere consumir, se puede colar o simplemente dejar en el fondo de la botella.
– Si encuentras que es muy ácida o «fuerte», se puede diluir en agua (filtrada o de botella, ya que no debe tener cloro).
– Para maximizar los beneficios lo ideal es tomar 1 vaso al día. Si se toma más de una botella en un día puede generar un efecto diurético en algunas personas.
– Si quieres contribuir al cuidado del medio ambiente puedes reciclar las botellas o nos las puedes devolver (limpias). Nosotros las volvemos a limpiar y sanitizamos para que sean reutilizadas.
*Personas que tinen VIH no deben consumir alimentos probióticos.
